El Carnavalito según la historiadora Lidia Inés Muñoz, es el carnaval en miniatura dónde participan los niños y adolescentes, la directora de la Academia Nariñense de Historia cuenta que en una primera fase y en un gesto desde la espontaneidad y la voluntad de los niños, son las carrocitas las que dan origen a este desfile.
Esta puesta en escena tiene un segundo momento, donde se incorporan las murgas, comparsitas y colectivos coreográficos, que además pone en la historia el nombre del periodista, encargado y gestor del desfile Carlos Enrique Pérez, que para la década de los 70’s impulsa en compañía de un grupo de ciudadanos el hecho que los niños desfilen primero que los adultos, pues para ese entonces el Carnavalito se desarrollaba el 3 de enero.
La historiadora cuenta que dentro de la tradicionalidad del Carnaval de Negros y Blancos de Pasto, su edad es distinta al Carnavalito, que según su perspectiva, cumple la función de escuela y de precarnaval.
Es importante mencionar que estos escenarios buscan fomentar la creatividad y la capacidad estética en las nuevas generaciones del carnaval, aquí muchos de los hoy artistas y artesanos que se presentan en el desfile magno del 6 de enero, han pasado primero por un desfile el 2 de enero.
Este desfile que se hace con un espíritu infantil e inocente, llega a la sensibilidad del espectador que se deja tocar del ingenio de aquellos pastusos que aún no llegan a la edad adulta.